Dentro del bienestar general, mantener una rutina de sueño óptima es uno de los mayores indicadores de salud. Y como todo hábito necesita un proceso y una constancia para extenderlo en el tiempo, ¡toma nota de todos los tips que te compartimos desde Factory Colchón!
¿Por qué es importante una rutina de sueño?
De cara a favorecer que el cuerpo y la mente funcionen a la perfección, es clave mantener una buena rutina de sueño que permita, entre otras cosas:
1. Regular el reloj biológico o ritmo circadiano que coordina funciones fisiológicas como el sueño, la vigilia, y la producción hormonal.
2. Mejorar la calidad del sueño: dormir y despertarse a la misma hora todos los días promueve ciclos de sueño más estables, claves para favorecer la memoria, la creatividad y el aprendizaje.
3. Fortalecer el sistema inmunológico: un sueño regular y suficiente ayuda al cuerpo a combatir infecciones y enfermedades, ya que favorece la producción de proteínas y células inmunológicas.
4. Optimizar el rendimiento cognitivo y físico: dormir bien mejora la concentración y el tiempo de reacción. También es esencial para la recuperación muscular y el rendimiento físico para ellos es muy importante el colchón, almohada y canapé sobre el que se duerme.
5. Prevenir problemas de salud a largo plazo: la falta de sueño crónica se asocia con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, obesidad y problemas metabólicos.
Beneficios de seguir una rutina de sueño consistente
Tanto a nivel físico como mental y emocional podemos destacar los siguientes beneficios:
1. Ayudar al cuerpo a disfrutar de todas las fases del sueño: consiguiendo un sueño profundo, importante para la recuperación física y mental del cuerpo.
2. Aumentar el bienestar emocional: descansar bien reduce la irritabilidad y mejora la estabilidad emocional. Además, disminuye el riesgo de ansiedad y depresión, ya que el sueño influye en la regulación de las emociones.
3. Conseguir una mayor energía y productividad: un descanso regular ayuda a mantener niveles de energía constantes a lo largo del día. Además, evite la sensación de cansancio crónico y nos impulsa a lograr una mayor motivación para completar las tareas del día a día.
4. Regulación del metabolismo y el peso: un buen descanso mejora el balance hormonal relacionado con el hambre, evitando comer en exceso.
5. Promueve la longevidad: la combinación de un sueño reparador y consistente con hábitos saludables contribuye a una vida más larga y de mejor calidad.
¿Cómo crear una rutina de sueño efectiva?
Para que el momento de dormir no nos genere estrés y logremos perfeccionar la rutina de sueño, es importante que tu lugar de descanso sea confortable y cómodo por lo que es muy importante saber elegir bien sobre donde dormimos, también se necesita establecer otras rutinas como:
- Horarios constantes: intenta dormir y despertarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana.
- Haz tu propio ritual relajante antes de dormir: elige la actividad que más te guste, desde leer un libro a escuchar música o darte un baño caliente.
- Crea un ambiente idóneo para el descanso: la habitación debe mantener una oscuridad y un silencio total y contar con un colchón y almohadas de calidad y adaptadas a tus necesidades personales. Además, es importante que la temperatura media esté en torno a los 15-19 °C.
- Limita la exposición a pantallas, al menos 1 hora antes de dormir: como ya hemos comentado en ocasiones anteriores, la luz azul inhibe la producción de melatonina, la hormona del sueño.
- Evita estimulantes: reduce el consumo de cafeína, nicotina y comidas pesadas cerca de la hora de dormir.
Estableciendo hábitos nocturnos saludables
Como complemento de la rutina y como trucos para dormir mejor, otras estrategias clave para potenciar el hábito del buen descanso son:
- Realizar actividad física de forma regular: actividades como caminar, hacer estiramientos suaves o practicar yoga son excelentes para relajarte sin sobrecargar tu cuerpo.
- Haz una práctica de gratitud o mindfulness: de cara a relajar la mente para dormir y reducir el estrés, trata de destacar e incluso apuntar los aspectos positivos que hayas vivido a lo largo del día, las cosas por las que sentir agradecimiento etc
- Recurre a los aceites esenciales relajantes: aromas como lavanda, manzanilla o sándalo ayudan a relajarnos. Se puede usar un difusor o aplicar unas gotas en la almohada.