Cómo dejar de roncar: soluciones efectivas para un descanso sin interrupciones

Seguro que en más de una ocasión te habrás planteado aquello de “cómo dejar de roncar” y es que según avanzan los años, está molesta vibración se vuelve cada vez más frecuente. Pero la buena noticia es que existen muchas formas de liberar las vías respiratorias y favorecer un mejor descanso, entre ellas la de invertir en un colchón, almohadas y ropa de cama de buena calidad. ¡Te recomendamos echar un vistazo a la selección disponible en Factory Colchón para elegir los que mejor se adapten a tus necesidades! 

¿Por qué algunas personas roncan mientras duermen? 

El origen del ronquido parte de una obstrucción parcial del flujo de aire a través de las vías respiratorias superiores mientras dormimos. Este fenómeno crea una vibración (el sonido que conocemos como ronquido) en los tejidos blandos de la garganta, la lengua o el paladar. Y entre los motivos que lo provocan se encuentran: 

1. La obstrucción nasal provocada por resfriados, alergias o la desviación del tabique nasal lleva a las personas a respirar por la boca y por tanto a roncar más. 
2. El sobrepeso: el exceso de tejido graso en cuello y garganta estrecha las vías respiratorias. 
3. La postura al dormir: descansar boca arriba hace que la lengua se desplace hacia atrás, obstruyendo parte de las vías respiratorias. 
4. La relajación de los músculos: en las fases más profundas del sueño, la relajación de los músculos de la garganta hace que las vías respiratorias se estrechen en mayor medida. 
5. El consumo de alcohol: esto relaja aún más los músculos de la garganta, aumentando las posibilidades de roncar. 
6. Ciertas condiciones médicas como la apnea obstructiva del sueño o las amígdalas agrandadas potencian los ronquidos. 

¿Cómo se producen los ronquidos? 

Los ronquidos se dan por la vibración de los tejidos blandos en las vías respiratorias superiores cuando el flujo de aire encuentra una obstrucción parcial durante la respiración mientras se duerme. A lo largo de las diferentes fases del suelo los músculos de la lengua, el paladar y la garganta se relajan y esto es lo que provoca el estrechamiento de las vías respiratorias. En esta situación, el aire que pasa a través de ellas tiene que moverse más rápido y esto es lo que provoca las vibraciones conocidas como ronquidos. 

Tipos de ronquidos 

Según la causa, la intensidad o su relación con ciertos problemas de salud podemos clasificarlos como: 

• Ronquidos ocasionales: son leves, esporádicos y producidos por resfriados, alergias o consumir alcohol antes de dormir. 
• Ronquidos primarios: son más frecuentes, pero no influyen en la calidad del sueño ni causan grandes interrupciones respiratorias ni están relacionados con la apnea del sueño. Aunque pueden ser molestos para las personas que duermen al lado, no son perjudiciales para la salud. 
• Ronquidos por apnea del sueño: son muy fuertes y normalmente se interrumpen con pausas en la respiración, acompañados de cierta sensación de asfixia por lo que requieren seguimiento médico. 
• Ronquidos relacionados con el sobrepeso: son muy fuertes y persistentes y suelen empeorar al dormir boca arriba. 

Soluciones para dejar de roncar

Para reducir de forma progresiva los ronquidos, existen varias estrategias entre las que se encuentran los cambios en el estilo de vida. Es decir, desde mantener un peso saludable, evitar el consumo de alcohol antes de dormir o mantener un horario de sueño regular. 

Otra solución es revisar nuestra posición al dormir y sustituir la posición boca arriba por la de lado. Para ello te ayudará contar con un colchón y almohadas que permitan mantener una postura cómoda a lo largo de la noche. Resulta imprescindible contar con un colchón que ofrezca un buen soporte para la columna vertebral, el pecho y el cuello y que nos permita disfrutar de un sueño reparador. Cuando no se descansa bien, llegan el cansancio y la fatiga que provocan que los músculos de la garganta se relajen más de lo normal y tengamos una mayor probabilidad de roncar. 

Este colchón de calidad se debe usar en conjunto con una almohada que mantenga la cabeza y el cuello alineados para evitar que las vías respiratorias se bloqueen y se produzcan los ronquidos. Las almohadas (sobre todo las que cuentan con un ángulo inclinado) también pueden usarse para elevar ligeramente la cabeza y abrir aún más las vías respiratorias

Por otro lado, es esencial controlar los alérgenos, lavando con frecuencia las sábanas y usando purificadores del aire para evitar el polvo y los ácaros, así como fortalecer los músculos de la garganta y de la lengua con ejercicios de respiración o con prácticas como el yoga. 

También existen recursos como las tiras nasales, el riego nasal con solución salina o los descongestionantes para despejar la obstrucción de las vías respiratorias y dispositivos bucales como las férulas mandibulares que mantienen la mandíbula y la lengua en una posición que evita la obstrucción de las vías respiratorias.